Casi el 80% de los conductores españoles preferirían ir al volante a ser meros pasajeros en un vehículo autónomo

Casi el 80% de los conductores españoles preferirían ir al volante a ser meros pasajeros en un vehículo autónomo

La Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) presentó hoy en el Hotel Miguel Ángel de Madrid su estudio «Vehículo autónomo: opinión de los conductores españoles», elaborado por científicos del Instituto de Tráfico y Seguridad Vial (INTRAS). 

Del estudio se desprende que el 77,4% de los conductores de nuestro país optaría por conducir, si hubiera vehículos autónomos; en cambio, el 22,6%, elegiría dejarse llevar por el coche. De los primeros, el 57,9% menciona el placer entre los motivos de su elección y el 56,1% invoca la seguridad.

Por regla general, las mujeres tienen en peor concepto la conducción automática y ponen más en duda su utilidad y su pronta implantación.

La gran mayoría cree que la eventual llegada del vehículo autónomo entrañará la necesidad de una formación específica para los conductores.
 

He aquí otros datos extraídos durante el trabajo de campo:
 

  • El 30,2% de los conductores opina que el vehículo autónomo es inútil o poco útil; un 26,4%, ni muy útil ni poco útil. Un 43,5%, útil o muy útil.
 
  • El 34,6% de los conductores encuestados considera poco o nada viable el vehículo autónomo. El 20,6%, mantiene una postura intermedia y el 44,8% cree que es bastante viable o muy viable. Los hombres muestran una confianza mayor en dicha viabilidad que las mujeres. Los titulados medios y superiores consideran más útil y viable el vehículo autónomo.
 
  • El 36% cree que el vehículo plenamente autónomo tardará en aparecer en nuestras carreteras entre cuatro y ocho años. Un 27,8% opina que lo hará entre 2026 y 2030; mientras que un 22,2% se inclina por una fecha más tardía. Tan sólo el 4,6% de los conductores opina que nunca llegaremos a disponer de vehículos autónomos circulando por las carreteras de nuestro país.
 
  • El 43,5% estima que el vehículo convencional será el mayoritario o único; el 23,7%, que el vehículo mayoritario o único será autónomo y el 32,9%, que ambas modalidades compartirán por igual las vías públicas.
 
  • Las mayores preocupaciones que produce el vehículo autónomo son, por este orden: que pueda llegar a ser controlado por un tercero (3.82, en una escala del 1 al 5), que pueda provocar un accidente del que sea responsable el conductor, cuando éste no tenía el control del vehículo (3.82); que las decisiones sobre el vehículo no sean del conductor, sino del sistema (3.79).
 
  • El 81,4% de los encuestados cree que los conductores necesitarán una formación específica para utilizar un vehículo autónomo.
 
  • El 56,1% de los encuestados considera que la formación sobre el uso de vehículos autónomos debe correr a cargo del fabricante; el 50% piensa que debe ser tarea de las autoescuelas y el 49,8% mencionó a la DGT.
 
  • En caso de accidente, el 47,2% considera que la responsabilidad sería del fabricante y del conductor; el 33,9%, que sería únicamente del fabricante; y el 18,9%, únicamente del conductor.
 
  • El 87,1% de los conductores no ha pensado en comprarse un vehículo autónomo.
 
  • Con respecto a los sentimientos que despierta en el conductor español el vehículo autónomo (y en una escala del 1 al 5) la desconfianza alcanza el 3,38; la inseguridad, el 3,36; el miedo, el 3,19, miedo; y el estrés, el 3,06.
 
  • Los trayectos cortos y cotidianos y la circunstancia de llevar niños a bordo, desaconsejan para los encuestados el uso del vehículo autónomo. Éste parece en cambio ventajoso cuando uno ha bebido o está cansado y ha de trasladarse en coche.
 
Características de la encuesta.
Universo: conductores de vehículos de entre 18 y 65 años. Casi un 30% tenían una edad comprendida entre los 35 y 44 años.
Ámbito: España, a excepción de Ceuta y Melilla.
Tamaño de la muestra: 1.205. Margen de error: 2,88%.
Entrevistas on-line o a través de un panel.
Sexo: 55,4% hombres; 44,6% mujeres.
 
 

Abrió el acto el presidente de CNAE, José Miguel Baéz, quien dijo: «Hemos querido dar a la sociedad y a las autoescuelas de nuestro país una visión de lo que puede venir en el futuro. En mi opinión, los avances tecnológicos siempre han sido beneficiosos para la automoción. El vehículo autónomo es imparable, aunque creo que su implantación no será inminente y siempre hará falta un conductor a bordo, incluso en el nivel máximo».


Presentó el informe técnico el profesor Luis Montoro.


Resumen técnico

Estudio completo


(Foto: de izquierda a derecha, José Miguel Báez, Luis Montoro e Ignacio Lijarcio, investigador del INTRAS.)